Un nuevo enfrentamiento entre los policías municipales y alguno de los 12 miembros que utilizan cada noche el llamado dormitorio de la Municipalidad de San José, vuelve a generar controversia entre las partes.
Ayer con video en mano y en compañía de un grupo de testigos, Edgar Gutiérrez, visitó Diario Extra para denunciar a dos oficiales de ese cuerpo policial que, según contó, los amenazaron y golpearon en el cuerpo y la cara, tras decir “algunas cosas”, lo que provocó enojo entre los policías.
“Yo dije que cuando una persona ingresa al dormitorio debe ser revisada, no me importa que me llamen indigente o ambulante, por cosas de la vida vivo en esta situación, pero lo que creo es que uno también merece respeto y el video es muy claro el oficial se frota las manos antes de golpearme y la mujer policía hasta me grita diciéndome insultos”, afirmó Gutiérrez quien dice que le quitaron la cédula y no se la quisieron entregar sino les daba el video.
La queja por los golpes y maltratos también llegó al Organismo de Investigación Judicial (OIJ) según consta en una denuncia interpuesta ayer a las 7:48 a.m. En el documento que está en poder del Periódico de Más Venta en Costa Rica, un hombre de apellido Quirós, testigo principal de la agresión, confirma la versión de Édgar Gutiérrez, quien teme que a partir de hoy tendrá que dormir en la calle debido a que tras el conflicto y la denuncia no lo dejarán entrar en el dormitorio municipal.
Diario Extra contactó a Marlenne Araya, de la policía municipal quien aseguró que “las cosas no son como se dicen”.
“Lástima que las personas no graben cuando a mí se me abalanzó. Yo estuve ahí, ellos vienen saliendo de dormir y le dicen a uno que los policías los roban, nos tratan mal (…) Deberían ser agradecidos porque la Municipalidad les da un lugar donde dormir”, reiteró Araya con voz fuerte y en tono violento.
Ante la consulta de por qué no arrestaron a los presuntos agresores y por qué no los llevaron al juzgado de turno para el debido proceso, Araya explicó: “los hemos llevado a contravenciones y el juez les dice que se vayan. No voy a denunciar más a nadie, estoy cansada de lo mismo, nadie hace nada”.
Ahora será el OIJ quien tendrá la última palabra tras la investigación.
